Sólo sé que no sé nada...

Según el DRAE - pedante.

(Del it. pedante).

1. adj. Dicho de una persona: Engreída y que hace inoportuno y vano alarde de erudición, téngala o no en realidad. 

 Una de las cosas que menos me gustan de las personas que me rodean es la pedantería, que como podemos ver en el diccionario de la RAE puede ser de dos tipos: sabiendo o sin saber.

Las personas que son pedantes porque saben mucho no me molestan tanto, es más, a veces me impresionan y captan mi atención, ya que me considero una persona con intereses diversos y me gusta aprender. Lo que no me gusta es que a veces las personas pedantes (las sabias) hacen sentir a los demás como inútiles e ignorantes. Sin embargo, puedo aguantar. El otro día tomando café con ex-compañeras de la facultad, nos acordamos de F., un chico pedante (de los sabios) que sabía de literatura y lingüística como el que más. Muy pedante, eso sí, pero que a veces conseguía captar la atención de los que le rodeábamos.

Lo que ya no soporto es a las personas pedantes que no tienen ni idea de lo que están hablando. Además, curiosamente, son personas que se permiten hablar de todo y a todos los niveles. Y es que son más incultas que nadie, oiga. Tengo una conocida que lo hace frecuentemente. Al principio me irritaba e incluso me llegaba a enfadar por lo que oía (a veces tremendas barbaridades) pero ahora hasta le he cogido "el gustillo". He optado por reirme y si puedo, hasta seguirle la corriente. Es divertido. Podría poner muchos ejemplos. Uno de los que me vienen a la cabeza es cuando dijo que ella poseía cierta característica genética que hace padecer una enfermedad, pero que se le había curado con un tratamiento, aunque desafortunadamente la había vuelto a contraer. Nada, que se le deben de caer los cromosomas a pedazos... ;-)

Madrileñadas parte I: Los domingueros

Hay una estampa que se repite a lo largo y ancho de esta nuestra capital de España todos los domingos por la mañana (sobre todo por la mañana) y que suele ser más habitual, en gasolineras de camino a la "Sierra", en parques y centros comerciales (si están abiertos): la del madrileño dominguero. Sin entrar en sus costumbres (tema que puede dar para varios post) voy a intentar analizar un denominador común para esta abundante especie: sus estilismos o, como se dice ahora en plan fashion, sus outfits.
El buen madrileño dominguero no hace caso de modas, pero siempre tiene que seguir unas pautas bien establecidas:
-En verano, camiseta holgada horrorosa de algodón varias tallas más grande. Los más "fisnos" lucirán un ejemplar de marca, los deportistas la de "renaul", y los más canis, una de propaganda tipo "Casa de citas Pacita". En invierno, forro polar siguiendo las mismas pautas que las camisetas.
-Bermudas en verano de algodón o de nailon para los más sofisticados, en invierno pantalón de deporte largo. Bueno no lo suficientemente largo como para tapar los omnipresentes calcetines de algodón blancos raya negra-roja.
-Y lo más "choni" del outfit: zapatillonas de deporte blancas de alguna marca conocida. Qué horror por favor.
Este estilismo será usado sin distinciones de sexo, edad o clase social.

Worst Sellers

Bienvenido a todo el que me lea (si me lee alguien), gracias por venir. Soy fiel lectora  de blogs de todo tipo (sobre todo de moda) y hace tiempo que quería tener un blog. Me he planteado muchas veces la temática y aunque reconozco que me encantan los trapitos y los estilismos sería incapaz de llevar como es debido un blog de ese tipo. Así que me he decidido a escribir un blog de lo que me de la gana y así poder hacer otra de las cosas que más me gustan: criticar. Allá vamos:

Soy una fiel lectora de todo aquello escrito en un idioma que entienda. Me gusta la literatura desde que era muy pequeña. He leído miles (quizá millones, pero no los he contado) de libros, revistas, manuales, etiquetas de champú...
Me gusta leer en castellano, en inglés, en francés, en portugués y hace algún tiempo lo hacía en alemán. Alguna vez he leído en italiano (en concreto un libro que me encantó titulado Io non ho paura). Me gusta todos los géneros, todas las temáticas, todos los formatos. He leído libros gordos y finos, de autores indios, chinos, franceses, colombianos, estadounidenses, austriacos, alemanes, españoles (entre otros). Así que puedo decir y digo: Algo de literatura sé. Aunque sea poco, algo más que la media de la población española.

Por eso me fastidia que se cuestione mi conocimiento sobre literatura, sobre todo cuando concierne a algo tan subjetivo como el gusto. En general, no tengo un gusto prefijado: me puedo leer novela negra o Le petit Nicolas. Sin embargo, reconozco, no sin cierta vergüenza ante los "intelectualoides" de este país (que por desgracia abundan), que los libros que más me han gustado o al menos de los que más me acuerdo son los "best sellers". No entiendo por qué la gente "intelectualoide" se empeña en decir que "ni loca" se leería un best seller. Y digo esto, porque el otro día comiendo con unas compañeras, a una de ellas, que va de supersabiadelamuertesémásquelaespasa y luego es la incultura en persona, se le ocurrió decir que no se leería "ni loca" ningún libro de la serie Millenium. ¿Cóóóóóóóómo? La serie Millenium es de lo mejorcito que he leído últimamente y qué putada que Larsson la palmara y no pudiera terminar la saga (aunque suene cruel). Y yo le pregunté: "¿y por qué no la quieres leer?", su respuesta fue: "porque no me van los best sellers". Y ya ahí me callé porque no me apetecía discutir. Sin embargo, me quedé con ganas de replica y por eso lo escribo aquí. Por más que lo pienso no puedo entender porqué a los "intelectualoides" no les gustan los best sellers (igual es que son más interesantes los worst seller, quién sabe).Quizá es leyéndolos se sienten que encajan en la sociedad y son personas del montón. Y claro, eso no lo quieren, piensan enfundados en sus pantalones Inditex. Claro que en el caso de mi compañera, es entendible que no le gusten los best sellers, siendo su escritor favorito, según ella misma atestiguó, Carlos Ruiz Zafón ;-).